como preparar nuestra propia nutella

esta entrada va más dirigida hacia hacia los monitores de campamentos

Estando de campamentos, quién no ha soñado con las rebanadas bañadas en nocilla.

Estos días todo el mundo quiere preparar el desayuno y meter el dedo en el pote de nocilla sin que nadie nos veo.

¡Mmmmmm! Rico, rico…

Hoy os explicamos cómo preparar vuestra propia nutella.

Puede ser una buena actividad para un sábado o para campas, pues no requiere muchos ingredientes ni materiales.

¡Ahí va!

Preparación: 5 minutos
Cocción: 5 minutos
Espera: 1 hora

Ingredientes (para un pote. Si queréis hacer más):

• 150 gr de praliné
• 50 gr de chocolate para cocinar
• 1 taza de leche condensada
• 80 gr de mantequilla dulce

Preparación:

• Fundid el praliné, el chocolate y la mantequilla al baño maría.
• Cuando se haya formado una masa bien homogénea, añadid la taza de leche condensada.
• Removed y mezclad bien.
• Una vez tengáis la masa sin grumos y con un aspecto homogéneo, introducidla en un pote de cristal (tipo de mermelada o legumbres, etc. Se recomienda hervirlo antes porque así, a parte de eliminar cualquier rastro del alimento anterior, la masa que añadimos se adherirá mejor).
• Cerrad el pote y dejad enfriar durante una hora.

Y… ¡tachán! Ya tenéis la nutella hecha.

Os podéis currar unas etiquetas bien chulas con los dibujos de vuestros castorcillos o lobatos, o el logo de vuestro Grupo Scout o lo que diga vuestra imaginación.

¿Y si hacéis más y la vendéis como extrajob?

¡Seguro que os la sacan de las manos!

A ver quién se anima a hacer nutella y nos envía una muestra… ¡Mmmmmm

trucos para hacer la mochila

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Para ello debemos considerar dos cuestiones fundamentales: dónde ubicamos el centro de la gravedad y cómo repartimos el peso.

El centro de la gravedad

No somos weebles o tentempiés, esos famosos muñecos que por más que les des no se caen.

Las personas sí que nos caemos y más si llevamos un peso mal puesto a nuestras espaldas.

Cuando hacemos la mochila, tenemos que tener en cuenta dónde ubicar el centro de gravedad.

Lo ideal es que esté lo más próximo a la espalda, coincidiendo con el centro de la persona.

El peso

La regla fundamental es saber distribuir la carga para no desplazar el centro de la gravedad.

Así, como nos muestra la imagen, dividiremos la mochila en cuatro zonas imaginarias:

• Parte superior: colocaremos la documentación y los objetos frágiles. También aquellos que necesitamos tener más a mano.
• Zona centro interior: equipo pesado, como las botas, material, la ropa más pesada…
• Zona centro exterior: peso intermedio, como el resto de la ropa, el botiquín, neceser…
• Parte inferior: peso liviano y de mayor volumen, un claro ejemplo es el saco de dormir.

Por otro lado, también tenemos que tener en cuenta nuestras posibilidades.

Un castor no puede llevar una mochila de 50kg. Y un ruta tampoco, no nos engañemos.

Lo ideal es tener en cuenta esta tabla:

Es fundamental no pasarse para evitar posibles dolores y problemas de espalda, cervicales… ¡Pensad que nuestros hombros cargan el 40% del peso!

Y el 60% restante, ¿dónde está?

Se reparte. Y de nosotros depende que este reparto sea equilibrado.

La clave está en ajustarnos el cinturón de la mochila y de esta forma el peso descansará en nuestra cintura.

Y si nuestra mochila está acolchada y tiene un cojín lumbar ya es lo más, así nuestra parte inferior de la espalda no sufre.

Ponedlo en práctica y nos contáis qué tal.